top of page

CAMBIOS EN IRÁN: ¿HACIA DÓNDE VAMOS?

Foto del escritor: Valentina Sedán ArceValentina Sedán Arce

Por: Valentina Sedán Arce


El pasado 19 de mayo ocurrió uno de los hechos más significativos en Irán en términos de estructura doméstica del Estado. Dos de sus figuras más influyentes fallecieron en un trágico accidente aéreo: el presidente, Ibrahim Raisi, y el ministro de relaciones exteriores, Hossein Amir-Abdollahian.


Bien se sabe que desde la revolución de 1979 la estructura interna iraní dio un giro de 180°. Ese sería nuestro primer punto de partida para analizar por qué estas dos personas eran clave para mantener homogeneidad dentro de sus fronteras y diseñar su política exterior en un contexto tan turbulento como el que se vive ahora en Medio Oriente.


Durante el proceso que siguió a la revolución, Raisi, en condición de vicefiscal de Teherán, se ganó el sobrenombre de “El carnicero de Teherán” gracias a las matanzas masivas que se realizaron a disidentes de la revolución que, según datos oficiales de la Amnistía Internacional de 2018, oscilaron entre 4.500 y 5.000 ejecutados. Sin embargo, estimaciones alternativas sugieren que el número supera las 30.000 muertes, pero no se ha confirmado.


Por su parte, Amir-Abdollahian fue ministro de asuntos exteriores entre 2021 y su fallecimiento. Fue el encargado de mantener los lineamientos de política exterior en el marco del conflicto entre Palestina e Israel desde el 7 de octubre de 2023 y quien estuvo, en cierta medida y junto a otros estadistas, detrás del bombardeo a Israel del 13 de abril de este año.


En estos días, Mohammad Mojber, vicepresidente, asumirá la presidencia interina hasta que se celebren elecciones; ahora, toca que el líder supremo designe a un vicepresidente. Esto lo determinan los artículos 131 y 132 de su carta magna, promulgada en 1979 luego del triunfo de la revolución. Dentro de los próximos 50 días deberíamos estar prestando atención a las elecciones.

Sin embargo, con las cuestiones inmediatas ya resueltas, surge la duda de cómo se va a organizar la administración pública de Irán luego del fallecimiento de Raisi a mediano y largo plazo, quien no solo era el presidente sino también el candidato favorito para convertirse en el próximo  líder supremo, cargo actualmente ocupado por Alí Jamenei. Según el derecho iraní, el que ocupe el puesto deberá ser designado por la Asamblea de Expertos. Sin embargo, los integrantes de esta asamblea son elegidos por el Consejo de Guardianes, quienes a su vez son seleccionados por el líder supremo. Es por este motivo que Alí Jamenei, quien era muy cercano a Raisi, tiene una injerencia importante en su propio proceso de sucesión y ahora se quedó sin su (probablemente) opción predilecta.


Raisi fue un reconocido alfaquí y figura política de poder en su país que se consolidó desde la revolución islámica con puestos como fiscal de Teherán, vicepresidente y presidente de la Corte Suprema, miembro de la Asamblea de los Expertos y, finalmente, presidente de Irán. Su pérdida deja un vacío de poder importante, aunque muchos lo cuestionan afirmando que era un presidente dócil sin una base de poder propia, pero el hijo del líder supremo es el personaje importante que aparece ahora como un posible sucesor.


Mojtaba Khamenei se mantuvo casi siempre tras bambalinas en esta teocracia islámica pero siempre con injerencia. Incluso, en 2019, EE.UU. lo acusó de trabajar en conjunto con la Guardia Revolucionaria y el Basij, una milicia paramilitar, para desestabilizar la región y reprimir al Movimiento Verde. Hamidreza Azizi, experto en Irán del Instituto Alemán de Asuntos Internacionales y de Seguridad, afirmó que tiene poder dentro varias esferas dentro del gobierno. No obstante, muchos académicos y clérigos iraníes afirman que no va a poder ocupar el puesto de su padre porque colectivamente no se quiere volver a una antigua monarquía hereditaria y, además, no tiene las insignias religiosas correspondientes. Entonces, ¿hay heredero? ¿Qué va a pasar con el proceso de sucesión del líder supremo? ¿Seguirá, entonces, Mojtaba Khamenei influyendo desde las sombras? ¿O va a imponerse más allá de cumplir todos los requisitos necesarios? Por ahora, hay que esperar.


A modo de conclusión, se puede decir que Irán se encuentra en un momento político delicado y en que se abrió el juego a que diferentes personajes, conocidos o no, tengan que apelar a sus habilidades para poder abrirse paso en esta carrera por convertirse en la nueva cabeza de poder en el sistema político iraní.


12 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comentarios


bottom of page